El asma es una enfermedad crónica en la cual los bronquios, los conductos por donde pasa el aire hacia los pulmones, no pueden dejar entrar al aire correctamente a los pulmones, ni le permite salir de éstos; por esta razón al paciente se le dificulta respirar.
La inflamación de los bronquios comienza cuando algún irritante o alérgeno entra en contacto con las vías respiratorias, en ese momento se inflaman y los conductos se hacen estrechos. Los síntomas pueden hacerse cada vez más severos y dar pie a un ataque de asma.
En un ataque de asma, comienza a segregarse excesivamente un moco que llena las vías respiratorias y esto complica aún más la respiración, puesto que limita la cantidad de oxígeno que puede ingresar a los pulmones.
Desafortunadamente, aún no hay cura para el asma pero existen medicamentos y remedios caseros que pueden ayudar a disminuir los síntomas para que un paciente con asma tenga una buena calidad de vida y sea productivo.
Remedios naturales para prevenir un ataque de asma
Debido a que el asma es una condición de mucho cuidado es necesario estar bajo la supervisión regular de un médico. Los remedios caseros solo pueden ayudar a disminuir las probabilidades de sufrir un ataque de asma.
Café: Si siente que le va a dar un ataque de asma y no tiene su inhalador a mano, puede tomarse dos tazas de café. La cafeína ayuda a reducir los síntomas temporalmente. La cafeína puede ser peligrosa para asmáticos que sufren de problemas del corazón y de presión arterial alta. Personas que están tomando teofilina no deben beber grandes cantidades de cafeína ya que puede causar interacciones.
Aceite de eucalipto: Algunas personas que padecen de asma encuentran efectivo el poner una servilleta mojada con aceite de eucalipto en una mesita a la par de la cama.
Otra opción es mojar una esponja y echarle unas cuantas gotitas de aceite de eucalipto. Se pone la esponja en el piso de la ducha mientras se baña con agua caliente. La combinación del vapor del agua caliente con el aroma del aceite de eucalipto, alivia el asma.
Jugo de zanahoria: Tomar a diario un vaso pequeño.
Sábila o Aloe vera: Hervir algunas pencas de sábila o aloe vera, previamente picadas, en una olla con medio litro de agua. Retirar del fuego y respirar el vapor.
Ajo: Machacar un diente de ajo y agregarlo a una taza de infusión de hierbaluisa. Tomar 1 taza tres veces al día para los adultos y la mitad para los niños.
Anís: Colocar 1 cucharada de semillas de anís en una taza de agua que esté hirviendo. Cubrir con un plato, no usar servilletas de papel pues éstas podrían acumular impurezas. Dejar tibiar (hasta 35.5 C°) y colar. Beber una o dos tasas durante las crisis.
Vino de manzana: Aplicar, sobre el pecho, compresas calientes humedecidas en vino de manzana.
Remedio para el asma: Mezclar 2 cucharadas de jugo de limón, 2 de jugo de cebolla y 1 de miel. Luego, calentar a baño de maría. Tomar este remedio dos veces al día.
Remedio para el asma:Vaciar 10 gotas de aceite de eucalipto, 6 gotas de aceite de pino, 10 gotas de aceite de romero, 4 gotas de aceite de ciprés, 8 gotas de aceite de lavanda y 4 gotas de aceite de mirra en una botella pequeña de vidrio que tenga tapa de cerrado hermético. Mezclat bien. Inhalar directamente de la botella durante el tiempo requerido para prevenir los ataques de asma.
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