Una de las claves para perder peso y mantenerlo estable es controlar el apetito. En ocasiones las personas llevan una dieta saludable y hacen ejercicio, pero su ansiedad por la comida les impide llegar al peso deseado.
Saber elegir los alimentos adecuados y combinarlos bien en cada una de las comidas principales es determinante para darle al cuerpo más sensación de saciedad durante la jornada.
Sumado a esto, se pueden tener en cuenta algunas “ayudas extra” como las bebidas naturales, cuya riqueza nutricional le aporta muchos beneficios al cuerpo mientras reduce el apetito para impedir la ingesta excesiva de calorías.
Infusión de avena
Como ya lo he mencionado antes en otros artículos, la avena es un calmante natural del sistema nervioso. Una bebida que ayuda a controlar la ansiedad se puede hacer con 1 cucharada de avena y 1/4 de litro de agua. Se hierve el agua y se le agrega la avena. Se deja reposar. Tómese una taza de esta infusión antes de cada comida.
Té de tilo, de manzanilla o de valeriana
Busque un lugar tranquilo y sin ruido y tómese una taza de té de tilo, de manzanilla o de valeriana. Estas hierbas son calmantes naturales y lo harán relajarse.
Agua de berro
Por su alto contenido de fibra (0.5 g por cada 100 gramos), el agua de berro es recomendado para controlar el hambre por más tiempo. En un litro de agua deja reposar 45g de berro desinfectado. Bebe cinco cucharadas antes de cada comida.
Agua de extractos de algas marinas
Un estudio publicado en la revista Obesity explica que las bebidas con altos niveles de alginato funcionan comosupresores del apetito. Las personas que tomaron bebidas con dosis elevadas de alginato redujeron entre 20% y 30% sus ganas de comer.
Licuado de plátano
Gena Hamshaw recomienda un licuado de plátano, leche de almendras, una taza de espinacas frescas. Esta bebida es efectiva para controlar el hambre.
Té verde
Las catequinas del té verde controlan los niveles de glucosa en la sangre e insulina, explican investigadores de la Universidad de Maastricht en Holanda. Cuando es estable el nivel de azúcar en la sangre es menos probable que sientas hambre o un vacío en el estómago.
Jugo de zanahoria, perejil, manzana y pepino para controla el apetito
Ingredientes
- Dos zanahorias
- Un pepino dos manzanas verdes
- Un puñado de perejil
- Medio vaso de agua (100 ml)
Preparación y consumo en dieta
Lo primero es hacer en trocitos la zanahoria y el pepino, luego se debe echar en el vaso de la licuadora. De inmediato de agrega la cantidad de agua estipulada y el perejil, ahora se debe licuar hasta que quede un jugo homogéneo y sin grumos.
Entonces se obtiene una bebida que ayuda a controlar el apetito y por ende a bajar de peso. Su bajo aporte de calorías y grasas es beneficioso para su consumo diario. El alto contenido de fibra, antioxidantes, vitaminas y minerales lo convierten en una bebida energizaste natural y difícil de rechazar pos su sabor.
Ser recomienda consumir antes del desayuno o bien si ya se está bajo una dieta para bajar de peso, consumirlo como desayuno. Por si solo no tendrá efecto, ya que el apetito irá desapareciendo, la mejor manera de potenciar su efecto es realizando una rutina de ejercicio cardiovascular dos o tres veces por semana.
Consejos para aprender a controlar el apetito
Bajar de peso requiere de toda la atención de la persona que está dispuesta a obtener este tipo de cambios en su cuerpo. En ese sentido es necesario la adquisición de hábitos de vida saludables como una adecuada selección de lo que se come, una rutina de ejercicios adecuada para el cuerpo y demás cosas que hemos mencionado anteriormente, pero saber controlar el apetito forma parte de este gran logro y en estos consejos podrás aprender tips ideales para poder controlarlo junto al consumo de estas bebidas.
Ahora bien, para garantizar que los resultados de una dieta para adelgazar no tarden en verse, hay ciertos trucos al bajar de peso que bien vale la pena poner en consideración. Aquí te damos algunas sugerencias para que lleves a la práctica y vencer este obstáculo (para algunos) que representa la realización de una dieta.
Aprendiendo a controlar nuestras ganas de comer insaciables:
Comer despacio. El cuerpo humano es sumamente complejo y es por esta razón que un mal hábito como lo es comer a la mayor velocidad posible puede repercutir en el peso. Cuando se ingiere un alimento los nervios del estómago envían la señal de satisfacción al cerebro, pero esa señal tarda entre 10 a 30 minutos para ser acatada. La solución está en evitar los excesos y tomarse el tiempo suficiente para comer y masticar muy bien los alimentos, así de simple.
Comer antes de sentir hambre. Si has pasado mucho tiempo sin comer, la sensación de hambre será incontrolable. No esperes a sentir hambre y come varias porciones al día con alimentos de calidad y saludables.
Dormir bien. La calidad del sueño nocturno repercute en la capacidad para controlar el hambre, si no se descansa aumenta el deseo por comer dulces y alimentos chatarra. Organiza tus horarios de sueño y busca dormir entre 7 a 8 horas sin interrupciones.
El consumo de agua es uno de los consejos más populares para controlar el hambre. Buena parte de las personas del mundo sufre de algún grado de deshidratación que luego podría confundirse con hambre. Ingiere una buena cantidad de agua al día.
Cuidado con las calorías líquidas. Con su consumo hay un incremento del azúcar en la sangre que puede implicar la necesidad de querer comer más. La solución está en limitar la ingesta de bebidas deportivas, lácteos y refrescos.
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