vcc

miércoles, 2 de diciembre de 2015

Porque Lloran Los Bebés y Como Calmarlos


El llanto de los bebés es una fuente de preocupación para muchos padres. Cuando un bebé llora y no sabemos porqué, nos ponemos nerviosos y se despiertan en nosotros sensaciones de ansiedad, desamparo, frustración e incompetencia que pueden ser seguidas de enfados, cólera y hostilidad. Cuando un niño llora casi nunca faltan los consejos, pero la mayoría de las personas no sólo no comprenden las verdaderas razones del llanto, sino que muchas de las sugerencias que nos dan son perjudiciales para el desarrollo emocional del bebé. Por ello es importante comprender las causas del llanto.

Hambre: Una vez que aprendas a reconocer las señales de que tu bebé tiene hambre lograrás darle de comer antes de que comience a llorar. Algunas de ellas incluyen: está inquieto, hace chasquidos con los labios, vuelve la cabeza hacia tu mano cuando le tocas la mejilla, y se lleva las manitas a la boca. 

Tiene el pañal sucio: Algunos bebés te lo comunican enseguida cuando necesitan que les cambien el pañal. Otros pueden tolerar un pañal sucio durante bastante rato. De cualquier forma, esto es fácil de observar y sencillo de solucionar. 

Necesita dormir: ¡Qué suerte tienen los bebés! Cuando están cansados, pueden simplemente echarse a dormir, donde sea y cuando sea. O, por lo menos, eso es lo que creen los adultos. 

En realidad, no es tan fácil como parece. En lugar de quedarse dormidos, los bebés pueden ponerse irritables y llorar, especialmente si están demasiado cansados. 

Es recomendable poner a tu bebé a dormir en cuanto bosteza por primera vez en lugar de esperar hasta que el cansancio lo altere. 

Quiere que lo tengas en brazos: Los bebés necesitan muchos cariños. Les gusta ver las caras de sus padres, escuchar sus voces y sentir los latidos de su corazón, y pueden incluso detectar su olor particular. Llorar puede ser su forma de pedir que lo cargues en brazos. 

Quizás te preguntes si lo estás "malcriando" teniéndolo en tus brazos tanto tiempo, pero durante los primeros meses de vida no lo vas a malcriar. Para darles a tus brazos un poco de descanso, puedes llevarlo en una mochila delantera portabebés o en un rebozo. 

Problemas de estómago (gas, cólico y más): Los problemas de estómago asociados con gas y cólicos pueden causar muchos ataques de llanto. De hecho, la condición conocida como cólico se define como un llanto inconsolable al menos tres horas al día y tres días a la semana, y por lo menos tres semanas seguidas. 

Si tu bebé se pone irritable y llora a menudo justo después de comer, quizás tenga dolor de estómago. Muchos padres aseguran que las gotas antigases que se pueden comprar sin receta o un agua medicinal preparada con hierbas y bicarbonato de sodio son mano de santo. Pero consulta con tu doctor antes de darle a tu bebé cualquier remedio. 

Incluso si tu bebé no tiene cólicos y nunca se ha puesto irritable después de comer, tener muchos gases ocasionalmente puede dejarlo hecho un mar de lágrimas. Si sospechas que esto es lo que le sucede, prueba algo sencillo para ayudarle a sacar el gas, como acostarlo sobre su espalda, sujetar sus pies y mover sus piernas en círculos como si estuviera pedaleando una bicicleta. 

Existen otras causas por las cuales tu bebé puede padecer de dolor de estómago. Entre éstas se incluyen: reflujo gastroesofágico, gastroenteritis o "gripe estomacal”, alergia a la leche o intolerancia a la lactosa, estreñimiento y cambios en la dieta así como obstrucción intestinal. 

Necesita eructar: Si tu bebé llora después de comer, quizás necesite eructar. 

Los bebés tragan aire cuando lactan o beben de un biberón, y si no sacan el aire pueden sentirse incómodos. A algunos bebés les molesta muchísimo tener aire en el estómago, mientras que otros no parecen necesitar eructar demasiado (para ideas sobre cómo ayudarlo a eructar, consulta nuestro artículo). 

Tiene demasiado frío o demasiado calor: Cuando tu bebé sienta frío, por ejemplo, cuando le quites la ropa para cambiarle el pañal, o le limpies las nalguitas con una toalla húmeda, te expresará a través del llanto que se siente incómodo. 

A los recién nacidos les gusta estar abrigados y calentitos. Como regla general, necesitan tener una prenda de abrigo más que tú para sentirse cómodos. Es menos probable que se quejen de tener demasiado calor que de tener mucho frío y tampoco llorará de manera tan enérgica. 

Algo pequeño le molesta: Los bebés se pueden sentir incómodos por algo difícil de notar como un cabello enroscado con fuerza en un dedito del pie o de la mano que le corta la circulación. Ésta es una de las primeras cosas que comprueban los doctores cuando examinan a un bebé que llora sin motivo aparente. Y algunos bebés son muy sensibles a las etiquetas de la ropa o a telas rasposas, así que puedes cortarle las etiquetas a su ropa o ponerle prendas suavecitas. 

Dentición: La dentición puede ser dolorosa cuando cada dientecito empuja a través de las tiernas encías. Algunos bebés sufren más que otros, pero todos tenderán a estar irritables y a llorar en un momento dado. 

Si parece que a tu bebé le duele algo, pero no estás segura de qué es, pásale un dedo por las encías. Quizás te sorprenderás al descubrir el bultito duro de un diente de leche que está a punto de salir. 

El primer diente suele salir entre los 4 y los 7 meses, pero puede salir antes. 

Quiere menos estimulación: Si bien los bebés aprenden de la estimulación que ofrece el mundo que les rodea, a veces les puede resultar difícil procesarlo todo y pueden sentirse abrumados con tanta actividad: las luces, el ruido o que lo pasen de mano en mano. El llanto es su forma de expresar que "ya ha sido suficiente por hoy". 

Si tu bebé empieza a llorar desconsoladamente, llévalo a algún lugar tranquilo, y déjalo desahogarse un rato. Después haz alguna actividad tranquila para consolarlo, como acunarlo, o cantarle una canción de cuna. 

A muchos bebés les gusta que los envuelvan bien apretaditos en una cobija (manta), como si fuera un tamalito. De esa manera se sienten más seguros cuando todo a su alrededor les parece abrumador. Si tu bebé ya es mayorcito como para que lo envuelvas como tamalito o si no le gusta eso, trata de sacarlo a un lugar sereno mientras se calma. 

Quiere más estimulación: Tu nene puede ser uno de esos bebés “exigentes” y extrovertidos que siempre quieren explorar. Es posible que la única manera de calmarlo cuando llora es manteniéndolo activo. ¡Esto puede ser muy pesado para ti! 

Puedes pasear a tu bebé en una cangurera, mochila frontal o rebozo. Llévalo a grupos de juegos o visita a amigos que tienen bebés. También pueden ir a la hora de cuentos para bebé en tu biblioteca local, al zoológico o al parque. 

No se siente bien: Si acabas de alimentar a tu bebé y de cerciorarte de que está cómodo, pero todavía sigue llorando, quizás es porque está a punto de caer enfermo. Tómale la temperatura para ver si tiene fiebre y observa si presenta algún otro signo de enfermedad. 

El llanto de un bebé enfermo suele ser distinto del llanto de un bebé que tiene hambre o está frustrado. Si el llanto de tu bebé suena como que "algo va mal", confía en tu instinto y llama al doctor. 

Consejos para calmar a tu bebé

No hay curación para el cólico, sino algunas cosas que usted puede hacer para calmar a un bebé que está llorando. Para ayudar al bebé a llorar menos, siga estos consejos:
  • Alimente al bebé con la cantidad necesaria, ni mucho ni muy poco. Los bebés que lloran después de comer pueden querer seguir mamando (lactando) en lugar de comer, o quieren llorar un poquito antes de quedarse dormidos. Hable con su doctor si no está segura de que su bebé esté comiendo suficiente.
  • Déle a su bebé cosas que pueda ver o escuchar las primeras horas del día. Para mantener al bebé calmado, evite juegos muy activos al final del día.
  • Cambie de posición al bebé. Si está cargando al bebé, póngalo en el suelo y deje que mueva sus piernas libremente. Si el bebé está acostado, cárguelo y háblele.
  • Cuando tome a su bebé hágalo con delicadeza. No lo sacuda o mueva con rudeza.
  • Cargue a su bebé en sus brazos. Mantenga los brazos del bebé pegados al cuerpo de él. Camine o siéntese en una silla mecedora, mientras platica con él en voz baja (susurro). ¡Recuerde ser delicado! Sacudirlo o moverlo con fuerza puede ocasionarle problemas o la muerte.
  • Siéntese o cargue a su bebé boca abajo, ponga sus manos debajo del estómago del bebé. Y muy despacio muévale sus piernas arriba y hacia abajo, y también encójaselas.
  • Acuéstese y póngase al bebé boca abajo sobre su estómago. Masajéele su espalda o solo acarícielo, despacio y con suavidad.
  • Déle a su bebé un baño tibio, y masajéele su estómago con sus manos, con jabón, o con una toalla suave.
  • Encienda el radio, aspiradora, secadora de pelo, secadora de ropa, o el chorro de agua. Algunos bebés se calman al escuchar ruidos definidos y estables.
  • Ofrézcale al bebé un pacificador, (otra vez recuerde, ser delicado, usted puede ocasionar una herida en la boca del bebé si es muy rudo.)
  • Lleve a su bebé a una caminata o en carro. Si usa carro, asegúrese de poner al bebé en una silla segura.
  • Ponga a su bebé en una silla mecedora (columpio); asegúrese que su cuello esté con soporte.
Buscando Ayuda Médica

Si sabe que su recién nacido llora demasiado, busque a un doctor para asegurarse que no hay un problema médico. Padres con bebés que sufren de cólicos no deben sentir miedo de hablar abiertamente con su doctor. Es muy importante mencionar cualquier preocupación que tengan para poder tranquilizarse. En algunas situaciones el doctor recetará algún medicamento, pero no hay ninguna medicina todavía que cure completamente el cólico en los infantes. Si el doctor les receta algún medicamento, pregúntenle si hay posibles efectos colaterales para el bebé.

No hay comentarios:

Publicar un comentario